lunes, 14 de marzo de 2011

Dios no premia al ocioso, ni al mal administrador.

"El que labra la tierra se llenara de pan, mas el que sigue a los OCIOSOS se llenara de pobreza". (Proverbios 28:19).

El camino mas rapido que existe para llegar a ser pobre es ser ocioso, ocioso segun nuestra lengua es aquella persona que no trabaja, que es inutil, que no tiene provecho. Lastimosamente ese ocio, ha llegado mal interpretado a la iglesia de Dios. Muchas personas piensan, que, como el ministrar personas es un trabajo y a eso se dedican, entonces ya no tienen por que salir a trabajar en lo secular, pues digno es el obrero de su salario. Eso es una verdad, pero, no absoluta. Pues si bien es cierto que Dios permite que el obrero tome su salario, y que ese salario no se debe tomar como un regalo sino como una deuda, tambien es cierto que el pastor NO DEBE ser una carga para las ovejas, dado que muchas, especialmente en estos tiempos de crisis economica, estan limitados, o mas aun, sin trabajo.

Pasar todo el dia orando, o leyendo las escrituras NO ES TRABAJO. Agrada a Dios el que le busquemos, el que le conozcamos, pero tambien hay que saber ganarse la vida. No podemos ir por la vida ALABANDO el nombre de Dios y dando un pesimo testimonio pidiendo dinero cada vez que lo necesitamos. Dios no bendice el ocio, Dios bendice el trabajo, y la buena administracion que hagamos de lo poco o mucho que EL nos permita obtener por ese trabajo, por supuesto, despues de haberle dado lo que a EL le corresponde. Meditemos.

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