viernes, 8 de octubre de 2010

Fulano... mi siervo.

Muchas personas cuando conocen los caminos del Señor y miran la belleza que es andar con Cristo, luego piensan en ponerse a servir. A los que sirven en los caminos del Señor se les denomina "Siervos". Pero, ¿Conocemos realmente lo que esa palabra significa, y, especialmente lo que implica?

Según los diccionarios bíblicos, siervo significa: "Dios da el nombre de ministros o servidores a aquellos que lo adoran (Génesis 26:24; Números12:7; 2da. Samuel 7:5 por ejemplo). Pero, lamentablemente tenemos que decir que, hoy en día, no muchos toman ese cargo por su honor y con el honor que se merece. Más bien lo toman como un medio de vida, y es por eso, porque son autonombrados ministros, apóstoles, siervos de Jesucristo, que ha habido tanto engaño y tanta frustración entre muchos pequeñitos en los caminos del Señor. Tenemos que reconocer que es el mismísimo Dios quien permite éstos tropiezos, no le toman por sorpresa como pudiéramos pensar. Pero, contrariamente a lo que los estudiosos nos dicen en los diccionarios, nosotros podemos ver en la escritrua que no solamente los adoradores son llamados "siervos" por Dios. Para comprobarlo miremos lo que nos dice Jeremías en el capítulo 43 y verso 10, cuando en ocasión de que el pueblo de Israel iba a ser llevado en cautiverio una parte y la otra se quedaba: "Y diles: Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí y enviaré y tomaré a NABUCODONOSOR rey de Babilonia, MI SIERVO, y pondré su trono sobre estas piedras que he escondido".

Cuidado pues, si queremos ser "siervos". Pues si es la voluntad de Dios enhorabuena pero si es un autollamado puede ser peligroso eternamente, pues Nabucodonosor era un impío. Hay siervos de siervos, pero si seremos uno de ellos, que seamos de los que Dios bendice para que traigamos bendición. Meditemos.

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